Autenticidad e influencia

Prefiero que me odien por lo que soy a que me admiren por lo que nunca seré

Kurt Cobain

Hay más de siete mil millones de personas en el mundo y cada una con una huella dactilar diferente, con una visión del mundo distinta, a pesar de que la realidad es “una”. En línea con esta idea, ya hace más de 2.000 años, Pirrón de Elis indicaba que la realidad no era alcanzable.

¿TIENES PERSONAS (O HIJOS) A TU CARGO? 

En un equipo de trabajo de 10 personas, hay 10 personas con realidades diferentes y es un reto para cualquier líder provocar un propósito común y a la vez lograr descubrir, reconocer y empoderar lo particular de cada uno, sin perder cultura de equipo.

Uno de los errores de los responsables de equipo, también de los padres, es tratar de que los colaboradores o hijos en su caso, actúen según el estilo del “jefe” o incluso trabajar “como se ha hecho siempre”. Para no alargar os pongo una anécdota ilustrativa al final de este post.

Tanto si un colaborador es junior o senior, es motivador que todos reconozcamos en el otro aquello que le hace diferente y también es un valor para el equipo permitir y fomentar la “crítica” como garante del aprendizaje. Cuando acallamos las críticas – aunque sea de forma imperceptible- acabarán apareciendo en forma de rumores en los cafés informales.

VALENTÍA PARA SER AUTÉNTICO

Cada vez pensamos menos y lo hacemos de forma menos crítica. En cambio, cada vez basamos más nuestras opiniones y decisiones en información “fake” o no contrastada y solemos seguir a la mayoría sin plantearnos por qué. En este contexto, necesitamos grandes dosis de valentía para opinar diferente; siendo precisamente esas diferencias las que nos hacen avanzar, las que demuestran nuestra “autenticidad” y nos hacen libres.

El mes pasado impartí una conferencia en una de las “Big Four”, público joven. En ella debatimos brevemente acerca de la foto de cabecera de este post y del sentido de la autenticidad. Esta foto ilustra uno de los cientos de homenajes a Maradona tras su muerte: un minuto de silencio al inicio de un partido de fútbol. En este caso, una niña valiente decidió sentarse de espaldas al público para demostrar que no estaba de acuerdo.

La autenticidad es una de las claves para ser influyente. Hablo de influir honestamente, a través de tu ser, del liderazgo que emanas, aunque también podríamos extrapolarlo a l@s «influencers» con miles de seguidores: ¿cuántas aportan valor y son originales?

Si eres uno más, serás uno menos

Motivemos la autenticidad, integramos la diversidad en nuestros equipos, valoremos las formas de pensar diferentes a las nuestras. Ser auténtico es un arma increíble para influir, sin embargo los grandes conversadores no establecen conversaciones con intención de “ganar” al otro con su idea o argumento, sino de construir juntos.

En el ámbito empresarial suelo asesorar acerca de la comunicación excelente y por ejemplo, para hacer un discurso, si tienes intención de influir, no es tan importante la buena oratoria como la personalidad que impregnas en tu mensaje. En una Ted Talk a la que fui invitado como conferenciante, lo primero que me dijeron es: “el mensaje debe de ser único en el mundo y personal”, pensaba hacerlo así, sin embargo me gustó que me dieran esa premisa.

“Nacemos originales, pero morimos copias”ón que nos deja atrás como personas.

Carl jung

ANEXO: UNA HISTORIA REAL. 

Esta anécdota me enseñó a comprender lo importante que es al liderar respetar lo auténtico de cada persona. En una ocasión, ocupando yo el puesto de “Director”, me acompañó a una reunión comercial importante Isabel (nombre ficticio), mi “jefa”. Se trataba de un cliente con quien ambos teníamos relación.

La reunión la preparé y dirigí yo al 100%. En el camino en coche de vuelta a la oficina, me dio feedback. Empezó con los típicos “positivos” (los había anotado) y, en la parte “mejorable”, fue dando vueltas a una serie de aspectos que estaban relacionados con mi estilo personal a la hora de abordar la sesión; yo no encontraba lo “negativo” de las evidencias. En resumen, mi jefa quería que hubiese enfocado la presentación con más argumentos racionales, con el “orden” lógico de una presentación, en lugar de como lo hice.

Se trataba de un proyecto de cambio y yo había decidido empezar con una foto totalmente ajena al mundo laboral, pero para mí representaba lo que estábamos hablando. Junto a la imagen escribí una frase, y posteriormente describí cómo sería la empresa con el proyecto ya implantado; es decir, hice un viaje con ellos al futuro (eran varias personas) y a partir de ahí fui al “proceso”, es decir, desgranar cómo lo haríamos. Isabel decía que así no se hacían las propuestas en esa empresa . Percibí “molestia” por haber realizado una presentación de forma diferente a como ella solía hacerlas y, siendo yo un directivo de su equipo, ella no quería que nos “desmarcáramos”.

Esta situación se repetía de vez en cuando, incluso cuando conseguíamos cerrar los acuerdos con clientes. Había una presión para hacer todos las cosas igual, a pesar de que cada uno de mis compañeros teníamos un estilo muy marcado.  

Neurociencia y confianza: ocho conclusiones (Harvard B.Review)

Las fórmulas no funcionan como ciencias exactas cuando hablamos de liderar personas. Las conclusiones que voy a compartir nos guían en la apasionante función de dirigir personas. Se trata de diferentes experimentos que demuestran la relación entre la oxitocina y la confianza.

Todos quisiéramos para nuestra Organización, nuestro Departamento, nuestro Equipo, una cultura donde se respire una mayor confianza y por tanto más posibilidades para innovar, crear sentido de pertenencia, eficiencia, bienestar psicológico, motivación….

Existen otros muchos factores, sin embargo, me ceñiré a los citados en el artículo original para honrar al autor del estudio.

En cada conclusión incorporo una pregunta a modo de “reto”.

1 Reconocimiento

El reconocimiento tiene mayor efecto sobre la confianza cuando ocurre inmediatamente después de que se ha cumplido un objetivo, cuando proviene de los compañeros y cuando es tangible, inesperado, personal y público.

¿Con qué frecuencia reconoces o fomentas el reconocimiento? 

2. Estrés moderado

El estrés moderado de la tarea libera neuroquímicos, incluidas la oxitocina, que intensifica el enfoque de las personas y fortalecen las conexiones sociales. Cuando los miembros del equipo necesitan trabajar juntos para alcanzar una meta ALCANZABLE, la actividad cerebral coordina sus comportamientos de manera eficiente. Esto solo funciona si los desafíos son alcanzables y tienen un punto final concreto.

¿En qué medida fomento un estrés “sano” en mi equipo? ¿Si tengo presión de “arriba”, la traslado tal cual o la filtro con inteligencia?    

3. Autonomía

Una vez que los empleados hayan sido capacitados, permítales, siempre que sea posible, administrar personas y ejecutar proyectos a su manera. 

Cuando alguien lleva a cabo de una manera diferente a como “yo” lo haría, ¿qué es lo que pienso, siento y promuevo?

4. Auto asignación de proyectos

Cuando las empresas confían en los empleados para elegir en qué proyectos trabajarán, las personas centran sus energías en lo que más les importa.

En una evaluación de desempeño, ¿doy espacio para que las personas me digan en qué tipo de actividad le gustaría involucrarse?

(aunque sea de otro departamento, por ej. un proyecto transversal que no impacta en los objetivos de negocio de “mi área”).

5. Compartir información

Esta incertidumbre sobre la dirección de la empresa conduce a un estrés crónico, que inhibe la liberación de oxitocina y socava el trabajo en equipo. La franqueza es el antídoto. Las organizaciones que comparten sus «planes de vuelo» con los empleados reducen la incertidumbre sobre hacia dónde se dirigen y por qué. 

¿Transmites la visión y la razón de los cambios y movimientos de tu Organización? No hace falta que estés de acuerdo en todo lo que se hace, como líder debes de apoyar las decisiones empresariales, ¿no crees? 

6. Construye relaciones intencionalmente

En el trabajo a menudo se recibe el mensaje de que debemos concentrarnos en completar las tareas, no en hacer amigos. Los experimentos realizados muestran que cuando las personas construyen intencionalmente lazos sociales en el trabajo, su desempeño mejora. La confianza y la sociabilidad que permite la oxitocina están profundamente arraigadas en nuestra naturaleza.

¿Fomentas las relaciones no formales? ¿Creas espacios específicos para ello?

Me refiero a tus espacios con tu gente, personalmente o en grupo, como espacios para tu gente (sin ti 😊)   

7. Crecimiento integral de la persona

Adquirir nuevas habilidades laborales no es suficiente; si no está creciendo como ser humano, su desempeño se verá afectado.

Cuando una persona de tu equipo solicita hacer una formación que no está directamente vinculada con su trabajo, ¿lo permites o sugieres que se forme en algo que técnicamente está en su paraguas de actividad?

8. Muestra vulnerabilidad

Los líderes en lugares de trabajo de alta confianza piden ayuda a sus colegas en lugar de simplemente decirles que hagan cosas.

La famosa frase de “soy tu jefe, no lo sé todo, y no pasa nada:

¿es parte de tu forma de ser con tu equipo? ; ¿Reconoces abiertamente que las personas de tu equipo son mejores que tú en ciertos aspectos , como por ejemplo en temas técnicos?

Por último, tres preguntas añadidas para tu diagnóstico y crecimiento, basadas en los estudios de Frances Frei, profesora de negocio de Harvard,   

  1. ¿Eres auténtico?
  2. ¿Eres rigurosos en tus razonamientos?
  3. ¿Eres empático?

“La confianza es una vía de doble entrada, si no das, no recibes”

Marcos Abollado

Fuente y artículo completo de la fuente: The Neuroscience of Trust. Management behaviors that foster employee engagement by Paul J. Zak

El poder de la conversación para construir cultura

¿Qué tienen en común el Chatbot Watson de IBM, Platón y William Isaacs (Director proyecto MIT “Dialogue”)? La importancia que le dan a la conversación, cada uno en su estilo.

¿Cuántas veces al día sustituyes una conversación por un email? Especialmente en esta época de trabajo híbrido es aún más habitual sustituir una conversación necesaria por un simple correo electrónico o mensaje de whatsapp.

Cada día se envían 320.000 millones de emails en el mundo, una cantidad creciente frente a la decreciente cantidad y calidad de las conversaciones, tanto en la empresa como en el ámbito personal.

Con los mensajes ganamos tiempo en el cortísimo plazo y, en muchas ocasiones según he observado, buscamos evitar confrontaciones. Con el email damos por buena la tarea de informar y hacemos un “check” mental.

La eficiencia de la gestión con los emails es indudable y muchas veces necesaria; sin embargo es tentador utilizar masivamente este medio evitando una conversación, aunque sea telefónica.    

Cuando surge un problema en la empresa, hay una conversación que no ha tenido lugar.

La calidad de la red de conversaciones de una organización dice mucho de la cultura de la misma (P.Drucker). Todos somos creadores de la cultura empresarial. Los directivos tienen más posibilidades de potenciar esa cultura, sin embargo cada empleado es 100% responsable de la calidad de las conversaciones y las temáticas que fomentamos (rumores, reclamos, construcción, destrucción…). 

Las conversaciones son la base de la cultura empresarial y la clave para la confianza en los equipos.

Cada conversación es una oportunidad para construir, crecer y aprender. 

Relato personal: en mi primera época en Adecco, tuve el hábito de mantener conversaciones fuera de la oficina, dando un paseo. Me funcionó muy bien, el contexto del paseo favorece la apertura de la conversación, es saludable y nos obligábamos a no tener que sacar el ppt o el Excel. Recomiendo esta práctica , incluso en reuniones grupales (famosas “Walking meetings”) aunque cierto es que “no llueve a gusto de todos” (algunos me dijeron que al principio les pareció un poco friki, pero después les gustó esa costumbre) . Fue un hábito de encuentros interesantes, coincidiendo con el buen clima de Madrid. Fui teniendo conversaciones necesarias con mi equipo, comprendiendo los contextos, el negocio, las personas…

En los talleres de Liderazgo creativo que yo mismo implanto, observo la necesidad que existe de utilizar la conversación , no para ganar, sino para construir, donde:

En una conversación es más importante la confianza que el ingenio

F. Rochefoucauld

Sin el ánimo de ser exhaustivo, he diseñado un esquema con las principales conversaciones de un mando y alguna de las claves, las cuales coinciden casi plenamente con las conversaciones de cualquier profesional.

La economía del comportamiento y el poder de tu voluntad

La toma de decisiones es resultado en muchos casos de una falta de autocontrol bastante predecible. Es decir, todos los humanos tenemos una serie de sesgos que de alguna forma pre-determinan cierto comportamiento, y que podemos aplicar cuando hablamos de propósitos para el nuevo año.

¿Cuándo surgen realmente los “problemas” en la toma de decisiones? Cuando el momento de la toma de la decisión y los resultados de dichas decisiones están separados en el tiempo. 

Somos optimistas por naturaleza, proyectamos el futuro en base a la emoción. Sin embargo, es nuestra voluntad el principal motor para hacer que las cosas ocurran, perduren y crezcan. Generalmente se da poco valor a la voluntad y nos da “pereza” pensar en ella.

Un buen ejemplo es el tuyo ahora mismo: ¿no te cuesta leer esta reflexión completa? Ánimo, ejerce esa fuerza de voluntad y lee hasta el final. 😊

En el ámbito de la empresa se habla mucho de cómo motivar a los empleados; pero la capacidad de motivar al otro es limitada. La motivación es más una decisión libre y personal. Por otro lado,

si nuestra “fuente de energía” para hacer las cosas fuera únicamente la “motivación” estaríamos perdidos,

pues cuando llegase el día que nos levantásemos sin ganas para hacer aquello que nos hemos propuesto o aquello que es nuestra obligación, simplemente no lo haríamos; o lo haríamos de forma deficiente. La fuerza de voluntad es absolutamente necesaria para alcanzar no solo nuestras metas y nuestros sueños, sino también para cumplir con nuestras obligaciones. Es un motor clave de las personas fuertes y comprometidas; mientras que las personalidades débiles y dependientes necesitan motivación constante.

Foto: Retrato de un instante

NOTA SOBRE MATRIMONIOS EN EL AÑO 2020: Según el INE, el año 2020 se celebraron en España cerca de 90.000 matrimonios. La mayoría de las parejas, cuando deciden dar ese paso piensan, o mejor dicho “sienten”, que ese cosquilleo durará toda la vida. Por supuesto que eso es posible, pero si queremos mantener la ilusión del primer día, se requiere una generosidad infinita por ambas partes, un aprendizaje diario y fuerza de voluntad. Ese mismo año 2020 hubo unos 80.000 separaciones y divorcios en España; con un elevado porcentaje de matrimonios rotos. Cuando una pareja deja de sentir ese “enamoramiento” a flor de piel, cuando surgen las dificultades, o crece la monotonía, muchas personas cortan por lo sano aduciendo esa “falta de motivación” de la que hablaba antes. La cultura del “no-compromiso”, de los trayectos cortos, de la obsolescencia programada que no es más que un síntoma de la falta de voluntad para luchar por lo que uno estaba construyendo, por un proyecto en común que seguramente merecía la pena…

La economía del comportamiento (“Behavioral economics”) ha investigado mucho sobre la toma de decisiones y la motivación. Permitidme compartir dos ejemplos extraídos del libro “Nudge” del Nobel de Economía Richar Thaler

CASO REAL 1: “Este año me propongo dejar de fumar y adelgazar 5 kgs”.

Cuando fumas un cigarro no notas que te esté afectando al pulmón de forma inmediata, ni siquiera en el corto plazo. El Gobierno obligó a incorporar en las cajetillas imágenes y mensajes como “Fumar mata”; es decir, una consecuencia diferida de fumar. Cuando fumas sientes cierto “placer” de forma inmediata, pero no las consecuencias negativas.

De igual forma, cuando estás a dieta y comes con amigos, al llegar el postre… a veces te dices a tí mismo “un día es un día”, disfrutas de forma inmediata del dulce (además del momento social de todos tomando un postre). Las consecuencias a veces llegan en forma de pensamientos a tu “conciencia” a posteiori (“no debería habérmelo tomado…”); y a la larga a no cumplir tu objetivo de dieta.

CASO REAL 2: “Voy a hacer una tabla de ejercicios a diario”

Imagínate que decides descargarte una APP en tu móvil que te ayuda a hacer ejercicios en casa ; y debes levantarte 30 minutos antes para realizarlos. En este caso ocurre lo contrario que en el caso anterior: el coste de hacer ejercicio es “inmediato” (madrugar, esfuerzo…) , pero la recompensa llega en el largo plazo.

Dos consejos:

  1. El elefante a trocitos. Por un lado tenemos que soñar a lo grande, por otro lado debemos de pensar en qué tiene que ocurrir para alcanzar ese sueño; márcate metas sencillas y realistas, sobre todo al inicio.
  2. Comparte tus objetivos con alguien: tómate un café con ese amigo y cuéntale tus propósitos;  el solo hecho de compartirlo te compromete y, si además, lo hacéis juntos mucho mejor.

PD: Un tío mío con fama de tener mucha fuerza de voluntad nos contó un día que cuando era joven leía mucho y cuando llegaba una escena interesante dejaba el libro para el día siguiente para fortalecer la fuerza de voluntad. Eso es ser un super héroe, los humanos de carne y hueso como yo, cuando nos enganchamos a un libro o a una serie, necesitamos acabar el capítulo hasta el final 😊

Reconectar y la cultura del encuentro

«El hombre es un ser social por naturaleza» Aristóteles (384-322, a. de C.). Nacemos con esa característica y esa necesidad social, no solo para desarrollarnos, sino también para “sobrevivir”.

En tiempos de pandemia algunos hemos tenido la suerte de mantener vivo nuestro ecosistema familiar. Como para muchos, para mí, con cuatro hijos adolescentes, ha sido un reto maravilloso y estimulante.

A nivel profesional, hemos aprendido a estar todo el día “conectados virtualmente”, apenas sin descanso…; y sin embargo no sólo nos ha fatigado, sino que no hemos logrado “encontrarnos”. Por ejemplo, si teletrabajamos, es habitual que si un responsable de equipo llama a un colaborador, sea para “pedir algo” en concreto y no con un objetivo de “conectar”, algo que en presencial es más fácil y natural que ocurra, algo que es más importante de lo que parece.

“La cultura se come a la estrategia para desayunar” .

Peter Drucker

Es complicado movilizar el negocio o establecer cambios en la organización sin dedicar tiempo y recursos a la transformación de la cultura.

¿Cuánto tiempo inviertes en buscar resultados y cuánto en fomentar una cultura que ayude al negocio?

¿Crear o mejorar la cultura es responsabilidad del departamento de “personas” exclusivamente?

Ahora que algunos volvemos a la oficina, en muchas ocasiones hacemos lo mismo que hacíamos cuando teletrabajábamos: “pegado al ordenador” (tareas, e-mails, reunión por teams…), ¿Crees que sería positivo dar un sentido a la “estancia” en algo más allá de la ejecución de una “tarea”? es decir, ¿qué me aporta ir a la oficina vs teletrabajar?

Es momento de reconectar, de aprovechar este experimento social que hemos vivido para capitalizarlo en nuevas fórmulas de trabajo y de relación en la empresa (y no digo trabajar en “agile”), generando una red de conversaciones enriquecedoras, por supuesto no haciendo una «fiesta» constante. Es necesario ser empáticos con situaciones difíciles que hayan podido afectar en este tiempo atrás a compañeros, colaboradores.  Tal vez no es necesario un “encuentro” diario con todas las personas constantemente, pero al menos ser conscientes de la importancia de reconectar y potenciar el espíritu de pertenencia. Un buen comienzo puede ser por ejemplo reunir al equipo a final de año diferente, para vivir alguna experiencia juntos e incluso que la decisión del qué y cómo sea tomada por el equipo, sin control ni supervisión por parte del mando.

Una empresa es una red de conversaciones (R. Echevarría), en este sentido:  ¿Qué tipo de conversaciones fomentamos? ¿sólo las programadas o también las espontáneas?

Y volver a la oficina nos permite aunar las posibilidades que nos ofrece todo lo digital con el potencial de tener a las personas cerca.   

Caso real: estando reunido con el dueño de la empresa, me sorprendo cuando mi “jefe” se molesta porque a través del cristal observa a un par de grupos hablando y riendo informalmente. La queja se centra en la “pérdida de tiempo”, buscando mi aprobación (que, por cierto, no encontró). Hay que desmitificar la creencia de que conversar no es trabajar para avanzar en nuevos estilos de relación y liderazgo.

La cultura del encuentro es necesaria para reconectar con nuestra esencia de seres sociales, para construir confianza.

Todas las personas en una organización somos 100% responsables de la cultura. Los líderes que dirigen tienen además capacidad de ser «xponenciales» de esa cultura.

Algunas empresas lo tienen claro. Recientemente he tenido el placer de moderar una reunión con los primeros 120 directivos a nivel internacional de una multinacional. Uno de los ejes centrales del encuentro y de los mensajes que co-creamos para la ponencia ha sido la reconexión del equipo directivo, la necesidad de ser embajadores de esa reconexión en el resto de la organización, estableciendo nuevas miradas.

Todos somos protagonistas y responsables de crear una cultura que nos permita trabajar en un ambiente de confianza.

Tres preguntas que me hubiera gustado que me hicieran en mi evaluación

¿Cuál es tu experiencia en las evaluaciones anuales del desempeño?

Tanto si la vives como colaborador como si lo haces como mando, la evaluación es una oportunidad para tener un encuentro con alguien que puede ayudarte.

En las conversaciones de café con algunos directivos, en torno a las evaluaciones, he escuchado mensajes como:

  • “ No me merece la pena puntuarle mal” (represalias de diferentes modos, empeoramiento de la relación…
  • “Su retribución depende una parte de lo que le puntúe, por lo tanto le digo los aspectos positivos y mejorables pero le puntúo alto”
  • “Buf, tengo que preparar la evaluación en el sistema de las 12 personas que dependen de mí…”

Quería compartir tres ideas que a mí me han ayudado a mejorar las evaluaciones:

  1. Imprime tu sello personal al proceso y herramientas corporativas, no tengas miedo a ser cercano. Es posible ser cercano sin caer en el buenismo, ¿no crees? 
  2. Se trata de una conversación, no de un trámite: Aprovecha para abrir puertas al futuro.: el feedback está bien y es necesario. Sin embargo es posible unir el feedback al feedforward, a que sea un punto de partida para el futuro. 
  3. Antes de la evaluación envíales alguna pregunta para que la conversación sea más rica. Los líderes debemos de tener la humildad e inteligencia para hacer buenas preguntas, no tanto para saber las respuestas. Yo en mis evaluaciones enviaba 8 preguntas más allá del “procedimiento” estándar de la empresa. Comparto tres de ellas, que son en definitiva las que me hubiera gustado que me hubieran preguntado alguna vez:

Con respecto al equipo:

¿Qué crees que podrías hacer tú para que el equipo fuera mejor?

Con respecto a mí (como mando):

¿Cómo puedo ayudarte a cumplir tus objetivos?

Con respecto a su actividad:

¿En qué tipo de proyectos, dentro de nuestro ámbito de actuación, te gustaría participar más?


Un ejemplo de lo que se vive alrededor de la evaluación y promoción, es el caso empresarial que neddux ha logrado llevar al #cineacademico. Comparto el tráiler:  

Las diez claves para lograr Webinars alucinantes

Historia real: Eran las 5 de la tarde cuando entré en una sala donde me esperaban directivos de una gran compañía energética con quiénes iba a compartir las conclusiones de un proyecto de customer experience.

En ese momento escuché una voz al fondo de la sala que me dijo con humor: “¿Vas a contarnos algo interesante o traes un power point?”. No pude evitar sonreírme. Con el tiempo, he recordado en infinidad de ocasiones – e incluso he sufrido en carne propia – ese mensaje amistoso que me lanzó mi cliente.

Sería por aquella época, cuando el gran mago Roberto Giobbi me dijo en una visita a Madrid: “Los espectadores perdonan cualquier error, pero no perdonan aburrirse”.

Esta introducción es para mí una de las esencias para lograr que tu webinar sea alucinante.

Hay decenas de claves que pueden ayudarte, si bien he decidido resumirlos en un decálogo para que te autoevalúes e incorpores alguna de estas ideas a tus sesiones.

Formar es una acción limitada que no implica que exista el aprendizaje. Debemos focalizarnos en lograr una experiencia satisfactoria del asistente. Graba alguno de tus webinars e invierte el tiempo en verlo después; puede que no aguantes ni 15 minutos.

Diseña un guion para visualizar la estructura, los puntos de anclaje, las dinámicas, interacciones… (y hazlo antes de preparar el ppt). POR SUPUESTO, el ppt NO puede ser tu guion. Yo utilizo dos tipos de guiones. Uno esquemático, incluyendo los temas a abordar, la clave de cada uno y tiempo asignado. Otro con más detalles. El guion es algo vivo.

Todos valoramos aprender. Sin embargo, es habitual que un webinar en la agenda se perciba como una interrupción que no nos permite avanzar en el trabajo. Por tanto, es importante crear un contexto de “buen rollo”; que la gente disfrute la experiencia y sienta que les es útil. Transmite los beneficios de la forma más concreta posible; tanto al inicio como durante la sesión; y con ejemplos de aplicación concretos.   

¿Cuáles son las ideas fuerza de mi sesión? Debemos ser poco ambiciosos con el número de ideas fuerza. Y no transmitir más de una idea por transparencia. La misma idea se puede repetir desde otros ángulos a lo largo de una sesión. Prefiero un webinar con 80 transparencias donde casi no haya palabras, que 15 transparencias llenas de texto o esquemas.

Los ejemplos y las anécdotas se retienen con mucha más facilidad , es la mejor forma para persuadir y aprender; pero es importante que sean memorables y aplicables. Por ello es clave conocer el colectivo al que te diriges, sus prácticas y sus retos en relación al tema sobre el que estás formando.

Una IMAGEN vale más que mil palabras. Por lo tanto, muy poco texto y mucha imagen. Si quieres utilizar algún video, debe estar claramente relacionado con lo que quieres que aprendan. Valora también su explotación como uno de los métodos más efectivos para la experiencia del participante.

Los participantes tienen ejemplos, situaciones, anécdotas y opiniones de gran valor para todos. Interactúa y saca partido a la inteligencia colectiva. No hace falta ser un gurú tecnológico; es más importante tener la inteligencia pedagógica para el cómo, el cuándo y para qué interactuar. Compartir visiones es además uno de los elementos que genera más satisfacción en el participante.

Para generar y mantener la atención propongo tres sencillos métodos. Mira a la cámara; el participante sentirá que le estás mirando a él. Incorpora alguna pregunta, aunque sea retórica, antes de presentar un dato o un concepto. Y en un nivel avanzado de comunicación, utiliza los silencios; aunque suelen ser incómodos en el formato webinar, hacerlo con inteligencia genera esa deseada tensión narrativa. 

Para que tu hipocampo “decida” ubicar una idea en la memoria a largo plazo, introduce la emoción, repite las ideas (hasta seis veces), ancla los aprendizajes con los propios participantes y, sobre todo, pregúntales cómo van a aplicarlo al día siguiente.

Si introduces humor y pasión por la temática, tendrás más puntos para que tu webinar sea memorable; las neuronas espejo harán su función de contagio. ¿En qué sobresales o qué se te da bien? Foméntalo. No hace falta que seas super-guay y enrollado si no es tu estilo. Sé tú mismo y, en función de tus talentos y tu personalidad, siéntete cómodo e intégralo de forma atractiva en tu comunicación.

En mi experiencia asesorando a comunicadores y formadores, el no conseguir un webinar de impacto se debe con mayor frecuencia a un fallo en el diseño y la estructura y no tanto a la ejecución.

¿Qué otros puntos incluirías tú?

Cuatro Tendencias 2021

¿Alguna vez pensaste que Apple se convertiría en la mayor financiera a nivel mundial o que la mayor empresa en venta de coches en España sería La Caixa?

¿Si te dijera que el cine es una fórmula artística para llevar el aprendizaje de calidad a su máxima expresión?

Ya os he destripado mi tendencia prefererida. A continuación describo brevemente cuatro tendencias, las cuáles podéis leer de forma integra en Capital Humano.

Tendencia 1: Good bye Lenin!

Adiós a la “formación”. Formar y aprender NO es lo mismo. El protagonista de la formación es el «profesor» y el protagonista de «aprender» es el alumno. Algunos de los retos para el área de «aprendizaje» es capitalizar el aprendizaje informal, dotar de herramientas para fomentarlo y además propiciar que todos seamos a la vez aprendices y profesores, lograr que el empleado sea dueño de su itinerario de desarrollo (y por consiguiente más comprometido con lo que él mismo ha decidido).

Tendencia 2: La casa de papel

Un mago a quien yo admiraba mucho, Roberto Giobbi, solía decir: «en una actuación de magia el público perdona un error, pero nunca perdona el aburrimiento». Es una frase aplicable a casi todo, especialmente en términos de comunicación o formación.

Google procesa más de 7 mil millones de búsquedas al día. De cualquier temática, existe algún recurso formativo en internet, Google lo sabe «todo», como el “profesor” en la Casa de Papel. Sin embargo nosotros no tenemos ni tiempo ni conocimiento para determinar lo que nos aporta valor, lo que necesitamos, lo tienen que hacer otros por nosotros, pero YA ESTA CREADO, solo hace falta identificarlo y ponerlo fácil al participante.

Tendencia 3: Black Mirror

Inteligencia artificial (IA) y 5G son las dos megatrends que impactarán en todos los sectores de actividad. Solo en IA la Comisión Europea invertirá 2,6 billones de euros en «El Horizon 2020».

Los humanos supervisando a las máquinas, la creatividad, el blockchain, UX design… son algunas de las claves para el «Up-RE Skilling», es decir, ese viaje de los profesionales para ser más empleables en los «nuevos» roles.

Tendencia 4: Twin Peaks

El título de esta tendencia se lo dedico a las personas de mi generación (una serie que supo mantener el misterio, aunque como tantas series, los últimos capítulos no estuvieron a la altura).

¿Por qué nombro las tendencias con nombres de series? ¿Por qué he puesto este título?

Por la misma razón que Netflix, HBO, Prime Video y DAZN llegan ya a 6,3 millones de hogares en España. Las series enganchan, están de moda, hay que subirse a este carro en el mundo del aprendizaje. Las webseries adaptadas, que son las que más desarrollamos en Adecco, deben de estar acompañadas de recursos que propicien la interactividad, la puesta en práctica a la realidad y la reflexión.

Ejemplo aplicable: Imagínate el método del caso de las escuelas de negocio llevado al cine, a una serie. El mejor ejemplo de esta tendencia es www.neddux.com, donde el cine es el vehículo para un aprendizaje de rigor. 

La atención, ese bien tan preciado…

¿eres vendedor? ¿eres formador?…

Hoy la atención es un bien preciado, tanto en la presentación de una solución para un cliente como en la formación a través de webinars, he investigado y aprendido de la psicopedagogía y la neurociencia de la comunicación.

WEBINARS:

Los webinars han inundado la oferta formativa y realmente ser excelente en un webinar requiere de una preparación diferente a la formación presencial, no se trata de manejar “teams” o “zoom”, sino de comprender cómo llegar al participante.

LA VENTA POR VIDEOCONFERENCIA:

De igual modo, en la presentación de una propuesta , producto o solución a un cliente, el relato , la estructura, el manejo de los tiempos, intervenciones es clave para tener enganchado al cliente en la conversación, llevando su atención donde queremos.

Si quieres leer el artículo en LA RAZÓN